Nuestra profesión se alimenta de nuevos retos que nos hacen crecer día a día. Somos afortunados de poder dedicarnos a nuestra pasión y, cuando eso ocurre, tener una avidez constante por aprender con el propósito de ser capaces de crear a través de la decoración con flores todo aquello que nuestros clientes sueñan para ellos.
Por eso, cuando un día nos llegó el mensaje de David Vásquez más allá del Atlántico supimos que algo bello iba a ocurrir. Porque Colombia nos sabe a luz y color. Nos seduce y nos atrapa. Un nuevo reto. Un nuevo sueño.
Antes de nada debemos decir que David Vásquez es un prestigioso Diseñador Floral y Productor de Eventos que realiza espectaculares montajes por toda América. De esos que cuando ves los resultados te trasladas a diferentes mundos de fantasía. Es capaz de llevarte de la mano y mostrarte auténticas obras de arte. Consigue que seas parte de cada uno de sus diseños y tan solo te dejes fluir.
Entenderéis la razón por la que nos sentimos tan ilusionados por aquella llamada y por todo lo que sabíamos iba a ocurrir. Y es que el reto, en este caso, era que ambas firmas pudiésemos realizar el proyecto desde estos dos continentes, lo que daría como resultado una increíble mezcla de culturas con sus diferentes maneras de enfrentar estos tipos de proyectos en el ámbito del diseño y decoración floral a medida.
¿Cómo poder explicar en unas pocas palabras la excitación que nos embargó desde el primer momento? Era como hacer realidad sueños que parecían imposibles.
Y nos pusimos manos a la obra. Todo el trabajo de dirección artística estuvo de la mano de David, mientras que la producción y ejecución estaba en nuestras manos, en la manos emocionadas de Masshiro Flowering Creative, una de las mejores floristerías de Madrid, bajo su supervisión.
El trabajo consistía en un nuevo cuento con final feliz: una ceremonia religiosa que tendría lugar en un marco de ensueño, el Castillo de Viñuelas en Madrid y que se celebraría en el Pabellón de Cristal. Nos vinieron a la mente sus torreones, sus amplios jardines que parecen renovarse a cada minuto con sus flores cuyo aroma nos embriaga. Imaginamos decenas de promesas de amor suspendidas en el tiempo. Y teníamos que recogerlas todas ellas para volver a crear el sentimiento que trae la eternidad.
Comenzamos a soñar y ese momento nos dio la solución: lámparas y estructuras florales caerían del techo mientras las mesas resaltarían con increíbles composiciones y arreglos florales amparando candelabros y jarrones de distintas alturas. Las flores de temporada serían las protagonistas y los tonos blancos y rosas pasteles salpicarían el entorno.
Ya que la boda se celebraría en un romántico otoño ya avanzado y a media tarde, sería imprescindible que la iluminación del salón fuera cálida y que luces de tímidas velas tomasen la importancia que tiene el misterio de la magia.
Todo fue perfecto y el momento quedó plasmado en nuestro corazón para siempre. Una nueva promesa tomó forma ese día y las miradas pasearon por el resultado de nuestras manos y nuestros corazones. Porque al final se trata de eso, de ser un decorado más de la vida. Salpicar belleza con belleza y que los minutos fluyan suavemente mezclados con olores y luz.
Tan solo deseamos que cada uno de nuestros proyectos de decoración floral exclusiva para bodas siga cargándose de esa fantasía que es la esencia del amor y que todo lo que deseéis esté dentro de nuestros corazones.
Mientras tanto tendremos los recuerdos de la mano de Rau Foto con sus impecable trabajo de fotografía y este vídeo que os dejamos con el making-off para que seáis parte de aquel día tan especial y disfrutéis de todos los trabajos previos realizados con las mejores flores para bodas y eventos de Madrid.
Gracias a David Vásquez por hacernos el regalo de la eternidad y por creer en los sueños.
http://www.davidvasquezdecorador.com/
https://www.aldoveacatering.com/bodas/#castillo
Video: http://www.raufoto.com/